Las unidades transforman la energía generada al frenar en electricidad para propulsar el autobús
Bizkaibus se suma al transporte público verde. La flota de autobuses va a incorporar mañana tres unidades con motores híbridos, que utilizan la energía generada al utilizar los frenos para propulsar el autobús.
Los tres primeros vehículos con motores híbridos de la flota de Bizkaibus entrarán el lunes en servicio en las líneas Bilbao-Santurtzi (dos de las unidades) y Bilbao-Barakaldo (un vehículo).
Los motores de estos vehículos, de la marca Volvo y que han sido adquiridos por TCSA, una de las empresas concesionarias del servicio de Bizkaibus, son híbridos, de gasoil y electricidad. Reciclan la energía y el calor que se genera al utilizar los frenos para transformarlos en energía eléctrica que, a su vez, se usa para propulsar el autobús. Se trata de un sistema especialmente indicado en los recorridos urbanos, ya que son en estos en los que con más frecuencia se utilizan los frenos.
Con este sistema híbrido, el consumo de gasoil se reduce hasta en un 30%, mientras que las emisiones contaminantes bajan entre un 40 y un 50%. Otra de las ventajas de este tipo de motores es su arranque silenciosos, al utilizar el motor eléctrico al inicio de la marcha.
Además de la motorización especial, los nuevos autobuses incorporan un diseño especial para recorridos urbanos, con suelo bajo y sistemas de accesibilidad para sillas de ruedas.
El servicio de autobuses de la Diputación proseguirá este año con sus proyectos de mejora, iniciativas que se han extraído del diagnóstico que, sobre el servicio, ha elaborado el departamento foral de Obras Públicas y Transportes. "Ese diagnóstico nos ha permitido elaborar propuestas estratégicas para poder seguir mejorando el servicio", explica la diputada responsable del área, Itziar Garamendi. Esas mejorar se incorporarán, además, a las condiciones de las concesiones del servicio que se tienen que renovar este año.
Líneas urbanas
La mejora en el servicio y el aprovechamiento de los recursos serán los pilares en los que se basarán las iniciativas. Bajo estos criterios, por ejemplo, se reconvertirán en líneas "cuasi-urbanas" aquellas que circulan en zonas donde funciona el metro, sobre todo en Ezkerraldea.
Por otra parte, se incrementarán las frecuencias de las líneas exprés, que conectan de forma rápida las localidades denominadas cabeceras de comarca con Bilbao y en las que actualmente no llega el metro. Desde que se pusieron en marcha en localidades como Durango, este tipo de servicio ha tenido muy buena acogida entre los usuarios, porque permite desplazarse en un menor tiempo al no hacer apenas paradas en su recorrido.
Además de estos proyectos, el departamento de Obras Públicas y Transporte también quiere reordenar algunas líneas que, actualmente y como consecuencia de la llegada del metro a nuevas localidades, resultan "absolutamente prescindibles" porque los usuarios apenas recurren a ellas, según advierte Garamendi. Ello permitirá utilizar esos recursos para incrementar el servicio en las zonas en las que es más escaso.
Instalar más terminales de información al usuario, mejorar la señalítica y seguir con la adaptación de la flota a las necesidades de accesibilidad serán otros de los ámbitos que aborde el departamento en los próximos tiempos, "en función siempre de la disponibilidad presupuestaria", finaliza la diputada foral de Obras Públicas y Transportes.
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